Pretende convertirlo en un centro turístico
Yungay: antes y después del aluvión del 31 de mayo de 1970.
El Campo Santo donde yace la ciudad de Yungay, que fuera sepultada por un aluvión la tarde del 31 de mayo de 1970, con cerca de 20 mil habitantes, sería transformado en un 'Moderno Centro Turístico' como parte del Plan Copesco del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), según lo dieron a conocer fuentes oficiales.
El anuncio hecho a poco de cumplirse 50 años de la tragedia que enlutó a nuestro país y conmovió al mundo entero, ha causado indignación entre los sobrevivientes y los descendientes de los apenas 330 pobladores que lograron salvarse, y que conservan ese rincón de la región Áncash como un santuario donde honran la memoria de los muertos en ese trágico día.
Los sobrevivientes y sus descendientes, encabezados por Raúl Vásquez, presidente del Club Yungay en Lima, se muestran sorprendidos por que el Mincentur pretenda ignorar o desconocer que el Campo Santo de Yungay es zona intangible, conforme a lo dispuesto en la Resolución Suprema Nº 005-77-ORDEZA del 12 de octubre de 1977, y que está inscrito como tal en Registros Públicos.
El rechazo cobra mayor dramatismo al conocerse con certeza que, durante la remoción de las primeras capas del suelo para construir el proyectado complejo turístico en el Campo Santo, han aparecido restos de las víctimas de la tragedia, los mismos que, en un acto de insensatez e inhumanidad, serían dispersados indiscriminadamente.
¿De lugar de peregrinación a centro de diversión?
Los moradores del antiguo Yungay responsabilizan, asimismo, a las autoridades municipales por su permisividad e indolencia frente a invasiones continuas de los pobladores aledaños, que se vienen apropiando de extensas áreas del Campo Santo, y que ahora está permitiendo la ejecución de un complejo turístico so pretexto de promover el desarrollo turístico de la provincia.
El presidente del Club Yungay en Lima, institución que representa al mayor número de sobrevivientes yungaínos, viene exigiendo que el Mincetur desista de tal despropósito, que afecta sensiblemente a los deudos de la histórica ciudad quienes tendrían que sumar al desarraigo de la tierra que los vio nacer, la desvinculación total con su pasado, declaró Raúl Vásquez.
En Yungay murieron 20 mil de las 70 mil víctimas que causó el terremoto de 7.8 grados.
En el mismo sentido, y a favor de cercar todo el perímetro del Campo Santo de Yungay, para darle la prestancia que le corresponde, se han pronunciado la Asociación de Yungaínos en Defensa y Desarrollo del Campo Santo, la Asociación Provincial de Yungay y el Comité Plaza Yungay de San Silvestre (Lima).
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