sábado, 28 de diciembre de 2019

Las santas inocentadas


Publicado en el diario oficial El Peruano el sábado 28.12.19


JOSÉ LUIS VARGAS SIFUENTES

Cada 28 de diciembre la Iglesia católica celebra el Día de los Santos Inocentes, en honor a los cientos de infantes menores de dos años que fueron asesinados en Belén por órdenes del rey Herodes.
Aunque se desconoce el origen exacto de esta conmemoración, es posible establecer que es bastante antigua, ya que el rezo y la fecha se encuentra en el Sacramentario gregoriano, cuya recopilación se hizo a fines del siglo VIII.
Sin embargo, sin que nadie recuerde por qué ni desde cuándo, el día es dedicado a la burla y a las bromas en perjuicio del prójimo más cercano, como lo hemos referido en una nota anterior. Decíamos entonces que en el Perú se hizo costumbre, por ejemplo, pedir dinero prestado en esa fecha, y al recibirlo, exclamar: “Inocente” y adiós deuda.
Lo curioso que ese tipo de bromas de mal gusto podían hacerse solo hasta el mediodía, pasado el cual ya no surtían tener ‘efecto’ o no ‘valían’. Una regla jamás escrita ni testimoniada por ningún cronista.
En un día como hoy se hacía gala de ingenio, viveza y malicia (‘criollada’, le dicen) para cobrarse la revancha contra alguien, poner en evidencia su torpeza, hacerle pasar un mal rato o evidenciar su inferioridad.
En cuanto a la celebración con bromas y carcajadas en muchos países europeos, algunos autores afirman que la tradición estuvo asociada con la ‘Fiesta de los locos’, que era celebrada por clérigos jóvenes durante algún día entre Navidad y Año Nuevo durante la Edad Media.
Eran fiestas carnavalescas, burlonas e irreverentes, en la que los jóvenes jugaban, bebían, comían en los altares, entonaban canciones sarcásticas y obscenas, hacían castigos graciosos, se disfrazaban y parodiaban a los sacerdotes; se colocaban las indumentarias al revés y hacían procesiones hacia atrás, entre otras cosas.
La conmemoración del Día de los Santos Inocentes se expandió por el mundo. En varias regiones las personas suelen disfrazarse, hacer danzas tradicionales y también hacer bromas a las personas que estén descuidadas o desprevenidas.
A diferencia de la forma en que se celebraba en el nuestro, en otros países se practican aún algunas bromas graciosas, como por ejemplo cambiar azúcar por sal. Es una broma clásica y consiste en cambiar el contenido del envase de azúcar por sal, con la recomendación que se haga a la hora del desayuno para que la persona caiga en la broma apenas iniciado el día.
Otra broma ‘sana’ es cambiar la hora del reloj. Se debe aprovechar un momento de descuido de la víctima para adelantar o atrasar las horas de todos los relojes a la vista. Esto hará que la rutina de la persona objeto de nuestra travesura vea alterada su rutina diaria, sin que se dé cuenta. Con las consecuencias subsiguientes.
Otra broma muy famosa y difundida en muchas regiones tiene relación con una moneda o un billete. Se trata de poner una moneda de alto valor y fijarla en el suelo con pegamento. Más de uno caerá en la trampa tratando de coger la moneda, sin lograrlo.
Si se trata de un billete –mejor si es de dólares o euro de alta denominación– se debe atar un hilo muy transparente y jalarla cuando la víctima intente recogerlo.
Ni qué decir del ‘baño ocupado’, que funciona excelentemente entre quienes trabajan en una oficina. Para llevarlo a cabo se debe utilizar un par de zapatos y un pantalón y dejarlo en el cubículo del baño. Quien requiera usar el baño creerá que hay alguien que se le adelantó y tendrá que esperar por un buen rato o dirigirse a otro baño más distante.
Otra broma es la llamada falsa. La tecnología actual puede ser una de las mejores aliadas (o ‘cómplice’, para el caso). Si se tiene un teléfono con whatsapp se puede hacer caer a más de una víctima que también posea un móvil inteligente.
Para ello, se debe utilizar la aplicación que permita realizar una habitual llamada telefónica realizada por una persona conocida de la ocasional víctima.
Actualmente, y por obra y gracia de las redes sociales, se pueden hacer una y mil bromas más. Solo recomendamos que sean de buen gusto para quien las reciba conozca luego que es simplemente una broma y que ha sido víctima de una inocentada, cuya intención era sorprenderlo y no hacerle pasar un rato desagradable.
Una última recomendación: al elegir a la persona-objeto de nuestra broma, tratemos de que sea alguien que acepte tomaduras de pelo y pueda ser el autor de una broma de la cual nosotros seamos el objeto de las suyas. Es su derecho a la réplica aunque tenga que esperar un nuevo Día de los Santos Inocentes.
No vale picarse, ¿de acuerdo?

viernes, 27 de diciembre de 2019

FELIZ AÑO 2020


A todos mis amigos,
familiares, colegas
y al mundo entero


Son los sinceros deseos de

José Luis Vargas Sifuentes
y Familia
Surquillo, diciembre de 2019


sábado, 21 de diciembre de 2019

Los juegos infantiles del ayer


Publicado en el diario oficial El Peruano el sábado 21.03.19
JOSÉ LUIS VARGAS SIFUENTES

Se acerca la Navidad y (casi) todos los niños ya están soñando con la sorpresa que les traerá Papa Noel, con toda seguridad lo último en tecnología celular o videojuego que se anuncian por todos los medios. Y seguiremos viendo niños, adolescentes y jóvenes concentrados en su aparatito, sin  importarle lo que ocurre a su alrededor e ignorando a quien esté a su lado.
La pregunta que nos hacemos es: ¿qué esperaban recibir los niños de mediados del siglo pasado, qué juguetes anhelaban ver depositados en sus medias colgadas con una cartita en la que expresaban sus deseos?
Ellas: una muñeca, mejor si abría y cerraba sus ojos o lloraba; un peluche o un juego de cocina. Ellos: un par de patines o una patineta; una bicicleta, un carrito o tren a pilas o un camioncito de madera.
Pasada la fiesta navideña, ¿cómo se divertían el resto del año, en grupos (nunca solos), en la vía pública y hasta altas horas de la noche?
Respondamos la pregunta recordando algunos de esos juegos que nos mantenía siempre unidos, jugando en patota y compitiendo sanamente unos contra otros. Muchos de ellos han pasado a la historia o al olvido.
Nos limitaremos a citar los nombres que les dábamos y algunas referencias sobre ellos, pues detallar en qué consistía cada uno significaría escribir una enciclopedia. Añoremos por un momento esos tiempos idos.
Entre los más populares, difundidos y recordados estaba jugar a las escondidas; ‘bata’, versión popular del béisbol; fulbito con pelotas de trapo forradas con medias de nylon de la abuela; yaz, que se practicaba con seis pieza de plomo o de plástico de seis puntas romas equidistantes -con sus variantes ‘chanchito’, ‘levis’, ‘pasadas’, estas con palmadas, etc.; ‘mundo’, que consistía en recorrer a pata coja diez cuadrados en forma de cruz dibujados en el suelo; ‘ping-póng’ y su variante ‘con canga’, que se practicaba con un taco y una varilla recortados de un palo de escoba.
Otros eran ‘gallinita ciega’; ‘matagente’; la ronda, con la recordada frase: “Lobo, ¿qué estás haciendo?”; ‘inmóvil’, ‘estatua’, bolero, yo-yó, trompo y run-rún, en el que se utilizaba chapas de bebidas gaseosas aplanadas con ayuda de los rieles del tranvía.
Cómo olvidar el juego de canicas con bolitas de vidrio o pepitas de jaboncillo (boliche), cuidando que nadie sacara ‘langa’; carreras con chapitas -cada cual con una figurita protegida por un pedazo de vidrio fijado con arcilla o barro- sobre circuitos dibujados con tiza en la acera; ‘pasar pelis’ (en un libro), con imágenes recortadas de los rollos de las películas antiguas. Con dos de estas dobladas se simulaban plumillas de dardos elaborados con cuatro palillos de fósforos, una aguja e hilo de coser.
Anotemos que mientras las mujeres jugaban al yaz con piezas de plomo, y los hombres a los soldaditos con piezas del mismo metal, nadie se preocupaba de sufrir de saturnismo, como ocurre hoy.
Nadie se llamaba a escándalo tampoco cuando montábamos bicicleta sin frenos –a veces sin pedales– y nos deslizábamos cuesta abajo, nos estrellábamos y retornábamos a casa llenos de arañazos en los que se mezclaban tierra y sangre. Nadie se alarmaba ni llamaba a la ambulancia: los ‘heridos’ nos limpiábamos con la manguera del jardín vecino, y de esa misma manguera bebíamos agua para calmar la sed. Para nosotros no existía la ‘vibrio cholerae’ causante del cólera.
Algunos nos divertíamos cogiendo a un ratoncillo, de los muchos que había entonces, lo atábamos a un palo en cuyo extremo inferior dos tapas de betún hacían de ruedas, y lo hacíamos correr espantando a las mujeres.
Cómo olvidarnos de los ‘anillos’ que elaborábamos haciendo un hueco en el centro de una pepa de durazno, con un pedazo de vidrio; las competencias con las tapas de cartón de las botellas de leche; la carrera con anillos de metal o llantas usadas; el ‘hula-hula’ que nos rompía la cintura; y el salto de la soga, una forma de gimnasia.
Durante el otoño la diversión era volar cometa (o barrilete), que fabricábamos con carrizo y papel de seda; recorríamos el mundo en barquitos y aviones de papel; y mientras las mujeres inventaban el ‘papepipopu’ para que no entendiéramos lo que se decían entre ellas; nosotros imitábamos a los mayores que cantaban usando el ‘cucuneo’. (Su último exponente fue el recordado Óscar Avilés.)
Y otros juegos por el estilo…
Algunos mayores afirman que quien no ha practicado estos y otros juegos ya olvidados, no ha tenido una niñez feliz. Otros dicen que recordar es vivir y que todo tiempo pasado fue mejor. ¿Usted qué opina?


lunes, 16 de diciembre de 2019

DISTINGUEN A DESTACADO FOTOPERIODISTA


Fotógrafo Óscar Medrano fue distinguido
por el Club Departamental Ayacucho


Óscar Medrano Pérez, el emblemático reportero gráfico de nuestro país, sumó un  nuevo galardón a los múltiples reconocimientos que ha recibido durante su vida profesional.
Esta vez fue el Club Departamental Ayacucho quien le otorgó una distinción a mérito de “las acciones meritorias que desempeña en bien del pueblo ayacuchano y peruano”, lo que enaltece a su tierra natal y a nuestro país, conforme lo destacó el presidente de esa institución, general PNP Jorge Cárdenas Sáez.
La distinción a Medrano le fue otorgada en la ceremonia de clausura de las LXVII Jornadas Ayacuchanas 2019, realizada en la sede institucional del CDA, en La Molina.
El fotógrafo histórico de la revista Caretas ha recibido anteriormente el Premio Mundial de Fotografía que otorga la agencia de noticias United Press Internacional; el Premio Nacional Periodismo y Derechos Humanos que concede la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos y el XVII Tumi USA Awrad, entre otros galardones, y es autor del libro ‘¡Nunca más!/Never again!’, una historia gráfica de los años del terrorismo en el Perú.



sábado, 14 de diciembre de 2019

Nuestra deuda con la ancianidad


Publicado en el diario oficial El Peruano el sábado 14.12.19
JOSÉ LUIS VARGAS SIFUENTES

            Seguimos insistiendo en la propuesta de las NNUU de hacer posible una sociedad multigeneracional que acoja como miembros natos y con todos sus derechos a nuestros mayores de 65 años, evitando la marginación de que son objeto en nuestra egoísta e insensibilizada sociedad.
Una de las formas de eludir nuestra obligación de atenderlos y asistirlos es su internamiento en centros asistenciales (albergues o asilos), que no es otra cosa que su segregación con respecto a la sociedad. Cada vez con mayor frecuencia recurrimos a aquellos locales cuando el anciano es no autosuficiente, no tiene familia o carece de recursos económicos suficientes.
            Además, la política educativa actual está vinculada íntimamente a la actividad laboral. Nuestros jóvenes son educados con miras al trabajo, lo que origina la falta de programas de formación para la tercera edad, desvinculada de las tareas productivas.
            En una época en la que el aprendizaje y la actualización constantes son una condición sine qua non para seguir el paso de la evolución tecnológica y obtener sus beneficios, los ancianos son excluidos de las políticas educativas, como si ya no tuvieran necesidad de estar actualizados, se les margina como si no pertenecieran ya a nuestro entorno. Mismos extraterrestres.
            Olvidamos que el ejercicio de una actividad posterior a la jubilación produce un efecto benéfico en la calidad misma de la vida. Por el contrario, la jubilación obligatoria da comienzo a un proceso de envejecimiento precoz. De ahí que el tiempo libre de que disponen los ancianos debiera ser empleado en desempeñar un papel activo, según sus capacidades y posibilidades, promoviendo su acceso a las nuevas tecnologías, permitiéndoles la realización de trabajos socialmente útiles y facilitando su acceso a experiencias de servicio y voluntariado.
            Lamentablemente, en nuestras sociedades hasta la muerte ha perdido hoy su carácter sagrado, su significado de realización, y se ha transformado en un tabú. Más aún, se hace todo lo posible para que pase desapercibida.
            Hasta el escenario cambia para los ancianos que llegan al final de sus días: hoy son cada vez menos los que mueren en su propia casa, y cada vez más los que lo hacen en un hospital o en un asilo, lejos de su entorno propio.
            También ha caído en desuso, sobre todo en las urbes, los momentos rituales de pésame y ciertas formas de piedad. Todo se reduce a algunas frases cliché: “Al fin está descansando”, “ya le tocaba”, “todos vamos a llegar a esto”, “pobrecito, por suerte no sufrió a la hora de su muerte”, etc.
Para la mayoría de leyes y tribunales nacionales, estas restricciones basadas en la edad están ‘objetivamente justificadas’, igual que sucedía con las distinciones por razones de sexo, principalmente contra las mujeres.
Nos equivocamos al considerar más aceptable la discriminación y exclusión de los mayores que la discriminación y exclusión de las personas por razón de su género, etnia o capacidad. Por el contrario, la discriminación por edad se suma a la carga discriminatoria que padecen diversos grupos (mujeres, migrantes, colectivos LGBTI, etc.), lo cual multiplica su riesgo de precariedad y de exclusión social.
Algunas de estas distinciones por motivos de edad ni siquiera tienen sentido. Es tentador pensar que la jubilación anticipada y obligatoria son necesarias para dar paso a la juventud en el mercado laboral. Sin embargo, según varias investigaciones, no hay pruebas de que tales políticas conduzcan a elevar las tasas de ocupación entre los jóvenes.
De un lado, estas políticas no abordan el problema del desempleo juvenil que pretenden abordar; y de otro, perdemos la experiencia y las aptitudes de las personas de más edad como posibles mentores. Las políticas de jubilación anticipada contribuyen, además, a estereotipar a las generaciones, enfrentando a los grupos de edad entre sí y alimentando el temor de las generaciones más jóvenes a formar parte, algún día, de las generaciones sénior.
Como sociedad, podemos beneficiarnos de las habilidades, experiencia y conocimientos de las generaciones mayores, si las involucramos activamente en la toma de decisiones, en nuestras comunidades y en el trabajo, remunerado o no.
            ¿Nos hemos puesto a pensar cuánto de todo lo que nos rodea les tenemos denegado a nuestros abuelos y ancianos, en general?
Nuevamente tenemos que recurrir al poeta para recordarnos que frente a la vida y frente a la muerte, a beneficio y por el bienestar de nuestros ancianos, hay, hermanos, muchísimo que hacer.

jueves, 12 de diciembre de 2019

Elecciones en Club de Periodistas del Perú


CLUB DE PERIODISTAS DEL PERÚ (CPP)
COMITÉ ELECTORAL (CE)
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COMUNICADO 04-2019-CPP-CE
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El Comité Electoral del Club de Periodistas del Perú (CE-CPPP) pone en conocimiento de sus asociados y gremio periodístico en general que los acuerdos tomados en su sesión realizada el martes 10 de noviembre de 2019:

1.- Reiterar su llamado a todo el gremio periodístico para que acudan a votar en las elecciones convocadas para el sábado 14 de diciembre, a partir de las 11 de la mañana.

2.- Invitar a participar en el acto electoral a todas las personas que se dediquen al periodismo, debidamente acreditadas, estén o no inscritas en el Padrón Electoral, así como los periodistas cesantes y/o jubilados, conforme a lo dispuesto en el Artículo 8.°  del Reglamento Electoral.

3. Recordar que la única lista inscrita y signada con el número 1, la integran las siguientes personas dedicadas al periodismo:

Lista N.º 1
- Néstor Kozo Ikeda Araujo – Presidente
- Mariano Bailón Pinedo – Vicepresidente
- Olga Arminda Yanayaco Benavides – Secretaria del Exterior
- Fanny Judith Tasayco Coronado – Secretaria del Interior
- Alida Liliana Valencia García – Tesorera
- Genebrardo Hipólito Luna Lártiga – Vocal
- Máximo Torres Miranda – Vocal

4.- Precisar que el acto electoral se desarrollará en la sede de la Asociación Guadalupana, ubicada en la Av. Alfonso Ugarte 1398 (esquina con la avenida España), donde se realizará también el almuerzo-bailable para celebrar las Fiestas Navideñas y el Año Nuevo convocado por la Junta Directiva del Club de Periodistas del Perú.

Dicho acto tendrá la siguiente secuencia:
- Votación: primera convocatoria: 11 am. Segunda convocatoria: 12 m.
- Escrutinio: Entre 1:30 y 2:00
- Proclamación y juramentación: 2:15 p. m.

5.- Recordar que para sufragar, el elector deberá identificarse con un documento que acredite, en los casos que se estime conveniente, su condición de dedicarse al periodismo y su DNI, y recibir en ese momento la cédula de votación.
En la cédula de votación, el elector marcará, solamente y en forma legible, el número de la lista por la que vota.
Para votar por un candidato bastará con marcar el signo de más (+) o un aspa (X) en la cuadrícula con el número de la lista. Cualquier otra inscripción viciará el voto.
El votante depositará su voto en el ánfora correspondiente y luego firmará el Padrón de Electores.

5.- Reiterar su invocación al gremio periodístico en general para que difundan el presente comunicado lo más ampliamente posible y por los medios a su alcance, a fin de que llegue a conocimiento de todos y cada uno de los colegas, socios y simpatizantes del Club de Periodistas del Perú.

Lima, 12 de diciembre de 2019

EL COMITÉ ELECTORAL

José Luis Vargas Sifuentes
Presidente

Jheison David Zelada Mamani                   Éver Alfonso Mamani Paja
                          Secretario                                                          Vocal






sábado, 7 de diciembre de 2019

Cómo combatir el edadismo


Publicado en el diario oficial El Peruano el sábado 7.11.2019
JOSÉ LUIS VARGAS SIFUENTES

A lo ya expresado en nuestra crónica anterior, debemos añadir esa tendencia, muy difundida en la actualidad, a ignorar y marginar a los ancianos. El edadismo (o discriminación por razón de edad) es omnipresente: está arraigado en nuestras culturas, instituciones y políticas. Está presente en la publicidad de productos para ‘combatir el envejecimiento’ o en las bromas sobre la muerte de los mayores como solución a la crisis de salud.
En algunos Estados de la UE, a los mayores de 70 se les niega el derecho a alquilar un coche, independientemente de su capacidad para conducir. Las personas con discapacidad tienen acceso a servicios hasta los 60 o 65 años, y algunas leyes los excluyen del acceso a tratamientos quirúrgicos punteros o a beneficiarse de la formación laboral. En el mercado laboral, un desempleado de 55 años es muy probable que no vuelva a tener empleo.
            El edadismo es uno, si no el principal, de los problemas de la actualidad, en un mundo egoísta y despiadadamente competitivo, donde el respeto a la vida y los derechos de los demás pasa a segundo plano. La atención se concentra en la eficiencia e imaginación de los jóvenes, y excluye de los ‘circuitos productivos’ y de las relaciones sociales a los de la tercera edad.
            A esos hombres que nos dieron vida y contribuyeron a forjar la sociedad en que vivimos, los alejamos poco a poco de nuestro ambiente social y familiar, los situamos al margen de la comunidad y de las actividades cívicas, y condenamos al abandono, la soledad y el aislamiento.
            Esa falta de relaciones humanas, de contactos interpersonales y sociales, de estímulos, informaciones e instrumentos culturales, los hace olvidar su pertenencia a la comunidad, y encerrarse en sí mismos, con el consiguiente proceso de autodegradación física y mental.
            Esa situación se agrava al verse impedidos de cambiar su situación e imposibilitados de participar en la toma de decisiones que les concierne como personas y como ciudadanos.
            Según gerontólogos, sociólogos, psicoterapeutas y los dedicados al estudio de la ancianidad, algunos ancianos asumen su vejez como un proceso natural de nuestra existencia y lo hacen con serenidad y dignidad.
Para otra mayoría de marginados, la vejez se convierte en un trauma. Para ellos, el paso de los años los lleva a adoptar actitudes que van de la resignación pasiva a la rebelión y el rechazo, como productos de la desesperación, o como expresión de algún mecanismo de defensa.
Mucho es lo que podemos y debemos hacer para superar las deficiencias, o ausencias, de la legislación oficial respecto a este asunto; para suplir las carencias o insuficiencias de las organizaciones sociales, y, sobre todo, revertir las incomprensiones de la sociedad.
Debemos comprometernos a lograr, como meta, que los ancianos formen parte activa de nuestras vidas y sean sujetos activos de ese período de la existencia humana al cual gran parte de nosotros también llegaremos, o aspiramos a llegar. No hay que detenernos en la búsqueda de formas y métodos nuevos cuya meta sea mejorar las necesidades y expectativas materiales y espirituales de los ancianos, y elaborar proyectos en defensa de ese período de la vida, de su significado y su destino; que los estimule a dar sus aportes personales, y ayude a lograr los beneficios que les corresponden por su participación activa en la vida de la comunidad.
            Modificar, hasta superar, la imagen negativa que se tiene de nuestros viejitos es una tarea cultural y educativa que debe emprenderse desde el seno de la familia y en la escuela. Cada niño debiera aprender, juntamente con las primeras letras, el respeto a las canas y el amor a nuestros abuelos, educándolos en la convicción de la necesidad que tenemos unos de otros.
            Es nuestra responsabilidad ayudarlos a que capten el sentido de su edad, a apreciar sus propios recursos y posibilidades y superar su tentación al rechazo, al autoaislamiento, a resignarse a sentirse inútiles y a la desesperación.
            Construir una ‘sociedad para todas las edades’, anhelo de la ONU, solo se logrará si se tiene como base el respeto a la vida en todas sus fases; aceptando la presencia de los ancianos como un don, una riqueza humana y espiritual nueva, un signo de nuestro tiempo que, si se comprende en toda su plenitud, puede ayudarnos a recuperar el sentido de la vida, que va más allá de los significados que le atribuyen ciertos gobiernos y organizaciones, el Estado, el mercado y la mentalidad dominantes.
Es necesario, pues, poner manos a la obra. Ahora.

miércoles, 4 de diciembre de 2019

CLUB DE PERIODISTAS DEL PERÚ (CPP)


COMITÉ ELECTORAL (CE)
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COMUNICADO 03-2019-CPP-CE
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El Comité Electoral del Club de Periodistas del Perú (CE-CPPP) pone en conocimiento de sus asociados y gremio periodístico en general que los acuerdos tomados en su sesión realizada el viernes 29 de noviembre de 2019:
1.- Inscribir oficialmente a la lista de candidatos a la Junta Directiva para el período Diciembre 2019-Diciembre 2020, encabezada por el colega Néstor Ikeda e, integrada por siete personas dedicadas al periodismo, debidamente acreditadas.
La lista inscrita con el número 1, la integran las siguientes personas:
Lista N.º 1
- Néstor Kozo Ikeda Araujo – Presidente
- Mariano Bailón Pinedo – Vicepresidente
- Olga Arminda Yanayaco Benavides – Secretaria del Exterior
- Fanny Judith Tasayco Coronado – Secretaria del Interior
- Mercedes Elizabeth Baca Gálvez – Secretaria de RR. EE.
- Alida Liliana Valencia García – Tesorera
- Genebrardo Hipólito Luna Lártiga – Vocal
- Máximo Torres Miranda – Vocal
2.- Acreditar e inscribir al periodista Fernando Ramón Torres Miranda como personero de su lista.
3.- Invitar a participar en el acto electoral a todas las personas que se dediquen al periodismo, debidamente acreditadas, estén o no inscritas en el Padrón Electoral, así como los periodistas cesantes y/o jubilados, conforme a lo dispuesto en el Artículo 8.°  del Reglamento Electoral.
El acto electoral se desarrollará el sábado 14 de diciembre próximo, con la siguiente secuencia:
- Votación: primera convocatoria: 11 am. Segunda convocatoria: 12 m.
- Escrutinio: Entre 1:30 y 2:00
- Proclamación y juramentación: 2:15 p. m.
4.- De acuerdo a lo dispuesto en el TITULO V, el acto electoral se desarrollará de la siguiente forma:
Artículo 23.°.- El CE habilitará una cámara secreta adjunta a la mesa de sufragio.
Artículo 24.º.- Para sufragar, el elector deberá identificarse con un documento que acredite su condición de dedicarse al periodismo y su DNI, y recibir en ese momento la cédula de votación.
Artículo 25.°.- En la cédula de votación, el elector marcará, solamente y en forma legible, el número de la lista por la que vota.
Artículo 26.º.- Para votar por un candidato bastará con marcar el signo de más (+) o un aspa (X) en la cuadrícula con el número de su lista. Cualquier otra inscripción viciará el voto.
Artículo 27.°.- El sufragante depositará su voto en el ánfora correspondiente y luego firmará el Padrón de Electores.
5.- El CE-CPP reitera su invocación al gremio periodístico en general para que difundan el presente comunicado lo más ampliamente posible y por todos los medios a su alcance, a fin de que llegue a conocimiento de todos y cada uno de los colegas, socios y simpatizantes del Club de Periodistas del Perú.

Lima, 4 de diciembre de 2019

EL COMITÉ ELECTORAL

José Luis Vargas Sifuentes
Presidente

Jheison David Zelada Mamani
Secretario

Éver Alfonso Mamani Paja
Vocal