Piqueo semanal

Al descubierto

En nuestro último 'piqueo semanal' nos preguntábamos qué mano mecía la cuna y mantenía agitada la situación política, con la huelga magisterial a la cabeza. Transcurridos estos días y visto y oído a los protagonistas, creemos tener más claro el panorama y la respuesta a las inquietudes de nuestros lectores y que hacemos nuestra. Vayamos por partes. Primero recordemos que Fuerza Popular, cuyo vocero, Héctor Becerril hizo ingresar y brindó una conferencia en el Hall de los pasos perdidos del Palacio Legislativo con los dirigentes más radicales del Sutep, ganándose el pleito de estos, se negó a participar en el diálogo con la ministra de Educación, en el que sí intervinieron, como mediadores, los voceros de TODAS las otras bancadas. El pretexto: "Somos respetuosos de la separación de poderes y el problema tiene que ser solucionado por el Ejecutivo".

Entre bambalinas

Antes de buscar la respuesta es esa interrogante debemos tener en cuenta que a todos los reclamos, la mayoría justos desde todo punto de vista, se sumaron otros, planteados –a la luz de hechos pasados- a sugerencia de un titiritero que orienta al principal partido opositor y a la dirigencia del magisterio, desde la sombra y utilizando medios de intercomunicación bastante sofisticados para evitar ser detectados. Los que nos hace recordar los teléfonos encriptados que utilizaba el buen amigo del gobierno fujimorista para manejar los hilos del poder.

Jugando con fuego

Nos parece cierto que, además de no tener nada que aportar porque es una bancada sin iniciativas ni ideas, salvo para criticar y poner trabas, su juego es otro. Siguiendo las pautas de su lideresa, que sigue pensando que es la presidenta de la República y se mantiene en la tribuna criticando a los que están en la cancha, sin aportar ideas para el buen gobierno, los anaranjados respaldan las exigencias de los huelguistas y los impulsan a seguir en la lucha, para luego retirarse, estratégicamente del ruedo, y seguir observando desde las tribunas.

Repitiendo la historia

Mientras que congresistas de la oposición lo consideran un acto inoportuno, los fujimoristas insisten en interpelar a la ministra Martens, pese a que no solucionaría nada y por el contrario solo conduciría entregar en bandeja su cabeza a los radicales y fortalecer al brazo político de Sendero Luminoso enquistado en el magisterio. Mismos Salomé entregando la cabeza de san Juan el Bautista a Herodes. Si cambiamos los nombres de los protagonistas, tendremos la respuesta a otra de nuestras inquietudes. La cosa es que FP quiere demostrar que puede hacer lo que le venga en gana gracias a una mayoría otorgada por una estúpida decisión de la mayoría de peruanos. "Para que sepan con quién se meten", dijeron varias veces. Las consecuencias no importan. La cuestión es demostrar que tienen la sartén por el mango… y el mango también.

   

Arando en el mar

Luego de tres días de ardorosas y agotadores reuniones, sacrificando el fin de semana (viernes, sábado y domingo) y llegado a un preacuerdo de nueve puntos en la que todos estaban de acuerdo, a última hora los dirigentes, con el cuestionado Pedro Castillo a la cabeza, patean el tablero y todo se va al carajo. ¿Qué había ocurrido en el interín? Los dirigentes pidieron posponer la firma del acta para, previamente, 'consultar' a sus bases. Hasta donde se sabe jamás hubo jamás tal consulta, pero sí llamadas telefónicas de congresistas anaranjados. ¿Qué dijeron, sugirieron o recomendaron estos a los conductores de la huelga? No se sabe, pero lo que sí se conoce es que se negaron a suscribir el acta la noche del domingo, sin explicaciones aceptables.

El gran Bonetón

Lógicamente, el 'señor' Becerril ha negado a los cuatro vientos (y lo seguirá haciendo) haber sido uno de los 'llamadores', pero cuidadito que por ahí aparezca una llamada chuponeada. Salvo que su seguridad esté sustentada en el uso de un teléfono encriptado al que hemos aludido líneas arriba, lo que dificultaría el chuponeo. Habría que esperar que una Lisbeth Salander real haya logrado superar esas barreras.

En el limbo

Otra cosa. En ningún momento los maestros que se mantienen en pie de lucha en la Plaza San Martín han sido informados respecto a los preacuerdos que sus dirigentes se negaron a suscribir.  Tal ignorancia la demostraron los sacrificados huelguistas cuando declaraban a los periodistas e insistían en sus demandas iniciales que el Gobierno ya había ofrecido atender, y que de hecho ha anunciado que cumplirá por motu proprio.

En las sombras

Para mayor abundamiento a nuestro análisis, y pese a que respetan la 'separación de poderes', la bancada fujimorista recibió la mañana del miércoles a los dirigentes radicales del magisterio, otra vez encabezados por Pedro Castillo, "para escuchar sus propuestas" (¿no sería para "recibir instrucciones'?). Al Salir del cónclave, el locuaz Castillo se negó a declarar a los medios sobre lo tratado en la reunión. ¿Por qué, ah?

Los beneficiados

Se dice que uno de los puntos no aclarados es la cuestión de las evaluaciones de los profesores, como lo estable la Ley de Reforma Magisterial. Es decir, que no se despida al maestro que, luego de tres evaluaciones, con capacitaciones de por medio, no sea aprobado. Aquí hay dos cosas: la referida ley fue aprobada durante el gobierno aprista (2006-2011) y ha venido siendo aplicada sin mayores cuestionamientos hasta hoy. Tratándose de una ley, esta puede solo puede ser modificada por otra ley y no mediante un pliego de reclamos ni por decisión de un ministro. Si los dirigentes magisteriales no conocen (o simulan desconocer, con fines políticos) nuestro sistema legal (y universal), simplemente están descalificados como maestros.

¿Excepcionales?

La segunda cosa: si un estudiante no aprueba tres cursos (entiéndase tres evaluaciones) debe cursar un estudio vacacional, y someterse a una nueva evaluación. Si no aprueba esta repite de año. Si tampoco supera esta nueva oportunidad, es retirado del colegio. Igual ocurre en la universidad. Y en cualquier centro laboral: al trabajador que no rinde en las evaluaciones a que es sometido se le despide sin miramientos. ¿Por qué los dirigentes del magisterio quieren ser la excepción? ¿Es posible aceptar que siga enseñando una persona no capacitada para ejercer el magisterio? ¿Puede aceptarse tamaña estupidez? En nuestra profesión, ¿puede aceptarse como periodista a una persona que no sabe leer ni escribir, y ni siquiera sabe quién es el presidente del Perú o de Estados Unidos?

Puntos suspensivos

Por último, insistimos en que algo esconden los fujimoristas en atención a una estrategia elaboraba por el exasesor de inteligencia del gobierno de Alberto Fujimori, que desde la prisión sigue orientando su 'sobrina', a la que atendió diligentemente mientras ella vivía bajo su cobijo en las instalaciones del  desaparecido SIN en el Pentagonito. S. E. u O.

Aquí lo dejamos. Por ahora.