sábado, 19 de agosto de 2017

Piqueo semanal

Olor a censura

Los promotores de la moción de interpelación a (o contra) la ministra de Educación dicen que solo buscan que ella explique las (supuestas) contradicciones entre su estrategia para enfrentar la huelga magisterial y las decisiones del presidente Kuczynski. Después de haber escuchado las explicaciones dadas por la ministra durante cerca de ocho horas en la Comisión de Educación, no se entiende qué más quieren que explique. La ministra volverá a decir lo mismo que ya dijo a los 65 congresistas que se hicieron presentes en la sesión de la comisión el pasado miércoles. Lo de 'interpelación' en un eufemismo y un 'guardar las formas' previa a la censura. De hecho, la ministra no va a cambiar la actitud de los intransigentes (léase la mayoría).

Ocho horas perdidas.

Contradicciones

En la referida reunión, las contradicciones de representantes de Fuerza Popular, Frente Amplio y del llamado Nuevo Perú estuvieron a la orden del día. Para muestra un botón: unos le exigían a la titular del Minedu que diera 'un paso al costado', y otros le pedían solucionar la huelga de un sector del magisterio ya, ya. ¿En qué quedamos: renuncia o cede ante las demandas? ¿Puede hacer ambas cosas a la vez?

Sin propuestas

En la misma cita los congresistas opositores coincidieron en criticar, sin fundamentos claros –dada su ignorancia sobre la materia- la Ley de Reforma Magisterial, porque "no ha cumplido con sus objetivos". Pero se 'olvidaron' que se trata de ley aprobada por el Congreso y su modificación corresponde a este mismo. ¿Alguien hizo alguna propuesta sobre qué puntos deben ser modificados o reformados? ¿Alguien ha presentado algún proyecto de ley sobre el particular? No se oye, padre.

Aclaración previa

Consideramos que las exigencias del magisterio son, sin duda alguna, justas y atendibles, pero la forma como la vienen planteando no nos parece la más correcta ni acertada. Son más de 380 mil los maestros peruanos, y el prometido aumento a 2,000 soles a partir de diciembre significa un mayor egreso de la caja fiscal, estimado en aproximadamente 1,450millones de soles anuales. Exigir un sueldo básico igual a una UIT (S/. 4,050), demandaría un desembolso mayor ascendente a S/. 9,000 millones. ¿Cómo se financiaría ese mayor presupuesto?

Extremismos

Otra demanda que rebasa todo límite razonable, planteada por Pedro Castillo, es que el presupuesto público anual destine un 10 % del PBI al sector Educación. Al respecto, citamos lo que dice el punto 12 ('Acceso universal a la educación pública gratuita y de calidad y promoción y defensa de la cultura y el deporte') inciso (i) del Acuerdo Nacional: "(El Estado) garantizará recursos para la reforma educativa otorgando un aumento mínimo anual en el presupuesto del sector Educación equivalente al 0.25 % del PBI, hasta que este alcanza un monto global equivalente a 6 % del PBI" (sic). Huelgan comentarios.

Extremos unidos

A principios del siglo pasado, Lenin utilizaba reiteradamente la frase "los extremos se tocan". Se refería a las oposiciones más radicales que, por el hecho de ser extremas, terminaban coincidiendo en agenda y propuestas. Esto está ocurriendo con el caso que nos ocupa. Ahora resulta que fujimoristas y sus opositores radicales de la izquierda coinciden en sus agendas (ambos piden la renuncia de la ministra) y en su propuestas (pedido de interpelación).  Los extremistas de uno y otro lado hoy marchan unidos de la mano, mismos siameses.

Malas juntas

Más aún: unos y otros apoyan abiertamente las exigencias extremas de Pedro Castillo, cabeza visible del Comité Nacional de Lucha y el Comité de Reorganización y Reorientación (¿a qué se refieren, ah?), conocido como (Conare). Héctor Becerril (FP), que defiende a un gobierno que se atribuye la derrota del senderismo, ofreció una conferencia de prensa, ladeado por Castillo y Édgar Tello Montes, integrante del Movadef, cuya inscripción como organización política fue desechada, precisamente, por sus vínculos con el senderismo y el 'pensamiento Gonzalo'. Si se trata de ponerle zancadillas al Gobierno, cualquier aliado es bueno. El representante naranja coincidía, así, con el apoyo que a esos mismos señores, le brindan los del FA y NP.

Becerril y sus amigos defendidos.

Los beneficiados

Como corolario de todo lo que viene ocurriendo, los únicos beneficiados serán los sectores radicales del magisterio, es decir, los estrategas del brazo político de Sendero Luminoso, vía sus organismos de fachada, llámese Conare o Movadef, que a la postre resultan lo  mismo. Buen favor que le están haciendo los fujimoristas y los representantes de FA y NP.

En el limbo

A todo esto no debemos dejar de pasar por alto la ahora falta de representatividad del SUTEP, cuyos dirigentes parece que ya no representan a nadie, y el acuerdo al que llegaron con el Gobierno es rechazado por los SUTE regionales. A resultas de lo cual la dirigencia magisterial está tan atomizada, con dirigencias regionales que plantean exigencias distintas, a cuál más radical y extrema, que obliga al Gobierno, a la ministra de Educación en particular, a enfrentar a un monstruo de cien cabezas. ¿Bastará cambiar a la titular del Minedu para ponerle el cascabel al gato? Nos quedamos con la duda.

¿Quién mece la cuna?

En medio de todo este pleito, hay otro punto que no debemos pasar por alto. Resulta extraño, si no sospechosamente coincidente, la forma como otros sectores laborales se sumaron, escalonadamente, a las exigencias del magisterio, poniendo en jaque a la administración de PPK. Recordemos: paralelamente a la huelga magisterial, se declararon en huelga los afiliados a la Federación Médica del Perú; se llegó a un acuerdo con el Ministerio de Salud, y al toque los obstetras se declararon en huelga. Se atendió sus demandas, y entraron a tallar las enfermeras. Se inició el diálogo con estas, y 'sorpresivamente' entraron en huelga los médicos y enfermeras legistas. Paralelamente, aparecieron en el bolo los trabajadores del Poder Judicial. ¿Qué sector seguirá luego? ¿Es simple coincidencia o un bien planificado plan de desestabilización elaborado por algún titiritero en la sombra? Insistimos: ¿Qué mano mueve la cuna? Los servicios de inteligencia -para esto están- tienen la respuesta.

¿Quién da más?

Lo anterior viene a pelo para preguntarnos quién (o quiénes) financia (o financian) esta masiva movilización de los maestros llegados a Lima desde distintas regiones (de Loreto, Yurimaguas y Pucallpa en avión, por si acaso) si sus sueldos son 'de hambre' ¿Cómo se mantienen en la capital, algunos desde hace un mes; quién paga su alojamiento, su alimentación; dónde hacen sus necesidades fisiológicas; cómo se mantienen – a los que los tienen- sus hijos en sus zonas de origen, y varios etcéteras más? ¿Quién (o quiénes) corre (o corren) con los gastos de tamaña movilización? Otra tarea para los servicios de inteligencia.

 

Contradicciones internas

A todo lo antedicho se sumaron las críticas que los congresistas oficialistas lanzaron a su propio gobierno, casos de Gilbert Violeta, su vocero, Salvador Heresi y Juan Sheput, que se sumaron a los cuestionamientos de los opositores y pedían 'oxigenar' (hacer cambios) en el gabinete ministerial; más el entredicho entre el primero de los nombrados y su colega Guido Lombardi. ¿Qué carajo pasa en el oficialismo? Para echarle más caldito al chancho el propio presidente se lanza a emitir un 'Mensaje a la Nación' en los precisos momentos en que su ministra hacía frente a las acusaciones y cuestionamientos de toda índole y de todo calibre en el Congreso de la República, interrumpiendo un debate que gran parte de los peruanos seguía con atención a través de la TV. Urgente: el Gobierno necesita un asesor político.

Mensaje inoportuno.

Antiéticos

Al final de todas estas disquisiciones, ¿alguien del Congreso se pronunciará contra los congresistas que se atrevieron enfrentar a la Policía e impedir que esta cumpliera con su misión de resguardar el orden púbico? La inmunidad parlamentaria no ha sido establecida para adoptar ese tipo de actitudes ni cometer atropellos contra la policía, cuya obligación es mantener el orden público. Y nadie debe impedírselo por muy congresista que sea. ¿Para eso gozan de inmunidad? ¿La Comisión de Ética tomará cartas es el asunto tratándose de dos aliados contra el Gobierno? Ya veremos, Sancho, decía Don Quijote.

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