El amor es...

El amor es fascinante y beneficioso

Poetas, cantantes, escritores, filósofos y cientos personas pensantes han dado su propia definición de lo que es el amor. No nos ponemos de acuerdo de qué es, pero todos lo disfrutamos.  La ciencia ha metido la mano en el asunto y ha encontrado sorprendentes beneficios para nuestra mente y nuestro cuerpo. Los siguientes son algunos de ellos.

El amor…

Es un analgésico natural

Un abrazo cálido es reconfortante y nos hace sentir bien. Sin embargo, estudios han demostrado que la oxitocina (una sustancia química en el cerebro que crea una sensación de calma y cercanía) liberada durante un abrazo de 10 a 20 segundos puede combatir el dolor, en particular los dolores de cabeza. Hay casos en que solo se necesita mirar la fotografía del ser querido. Al hacerlo, aumenta el umbral de resistencia y reduce el dolor (hasta un 40 % en casos moderados y un 15 % en casos graves). Nuestro cerebro asocia la imagen de nuestro compañero a una agradable distracción, lo que hace que cualquier tipo de dolor sea más soportable, actuando así como un analgésico.

Los científicos también han descubierto, y probado, que la estimulación sexual, especialmente los orgasmos, también hacen un gran trabajo bloqueando el dolor. Es especialmente eficaz para el dolor de espalda crónico, los síntomas de artritis y los calambres.

Cuida el corazón

Las expresiones de amor también tienen la capacidad de reducir a la mitad el ritmo cardíaco. Es más efectivo en situaciones estresantes, reduciendo el riesgo de enfermedades cardíacas a largo plazo. Además de liberar oxitocina, el amor también ha demostrado ser capaz de disminuir el estrés, la presión arterial y la ansiedad social; regular y aumentar la autoestima, y combatir la depresión.

Ayuda a luchar contra las enfermedades

También relacionado con actividad sexual, los gestos relacionados con el amor aumentan la producción de endorfinas, lo que a su vez mejora nuestro sistema inmunológico. Del mismo modo, las personas con afecciones físicas que se sienten amadas tienen una respuesta mucho mejor al tratamiento y se sienten más motivadas para luchar contra la enfermedad.

Trata el insomnio

Las hormonas del amor, la oxitocina y las endorfinas, inhiben la liberación de cortisol, una hormona responsable del estrés, y promueven un mejor descanso. Las relaciones sexuales también son un tratamiento más efectivo para una buena noche de sueño.

Disminuye la probabilidad de adicción y reduce los síntomas de abstinencia

Las drogas como los opiáceos, cocaína, nicotina y alcohol son adictivas porque afectan los niveles de dopamina en nuestros cuerpos. La dopamina es responsable de una oleada repentina de placer y efectos eufóricos. El amor, además de liberar dopamina, mejora la liberación de testosterona y oxitocina, que constituyen la mejor combinación para evitar y combatir la adicción. Por lo tanto, estar enamorado tiene la capacidad de llenar la vida con todo el placer y el éxtasis que necesita el ser humano. Al mismo tiempo, cuando se lucha contra una adicción, sentirse amado literalmente ayuda a sobrellevar los síntomas de abstinencia y reduce los antojos.

Promueve la longevidad

Según las encuestas, las personas en relaciones significativas, particularmente las que están en un matrimonio, se sienten más saludables y se benefician de un estilo de vida sano (incluidas las elecciones de alimentos, comidas regulares, mejor descanso y menos estrés). Estar involucrado sentimentalmente con alguien también hace que las personas aborden las condiciones físicas más rápido, lo que demuestra que las personas enamoradas y en una relación comprometida tienden a vivir más tiempo.

Es terapia

La gente recurre a la terapia por muchas razones. La mayoría de las veces, porque quiere ser escuchada y entendida. Sin embargo, no importa a cuántos especialistas se vaya, la persona más capaz y disponible para ofrecer escuchar es la persona que se ama. El apoyo y afecto de esta son, mental y fisiológicamente, el principal medicamento con el que debemos lidiar en relación con nuestras fobias, depresión, ansiedades sociales y condición física.