lunes, 19 de junio de 2017

Muros de la vergüenza II

En un informe que publicamos en este mismo blog el 5 de marzo último dimos a conocer la existencia de decenas de muros en el mundo y en nuestra propia ciudad capital. La cosa es que, pese a todo, se siguen construyendo con fines inconfesables.

Hace varias semanas la cancillería peruana expresó su preocupación por la construcción de un muro emprendida por el gobierno ecuatoriano en la margen derecha del río Zarumillla, limítrofe con el Perú, que podría traer "graves consecuencias" económicas para las poblaciones fronterizas de ambos países, y sobre todo, afectar el proceso de integración iniciado a partir de la suscripción de los acuerdos de Brasilia en 1998.

Hasta ahora, Ecuador ha hecho oídos sordos al reclamo peruano y sigue en su tarea.

Independientemente de cualesquiera consideraciones políticas, lo cierto es que ese tipo de muros 'limítrofes' divide a los pueblos de ambo países, que debiéramos vivir hermanados.

  

La pared de hormigón que construye Ecuador en la frontera con Perú tendrá 800 metros de largo.

Los primeros tramos construidos ya superan los 3 m de alto.

Todos los países del mundo estamos divididos simplemente por puntos y rayas que figuran en los mapas, pero no logran evitar la convivencia pacífica entre sus pueblos. Lo que nos divide son las decisiones políticas de los gobernantes detrás –o encerrados dentro- de cada una de esos puntos ortográficos, por lo menos en nuestra América del Sur.

¿Acaso esos puntos y rayas pueden impedir que entre los pobladores de cada uno de nuestros países no podamos sentirnos atraídos entre sí y formar familias, independientemente de su respectiva 'nacionalidad'?

Muros en Lima

Estamos acostumbrados a mirar la paja en ojo ajeno y no el árbol que tenemos en nuestra frente. No vemos (tratamos ocultar, mejor dicho) lo que ocurre ante nuestros ojos: paredes, rejas, púas y muros construidos por nosotros mismos para dividir dos realidades.

El primer muro de la vergüenza (llamémoslo por su verdadero nombre) es una pequeña réplica de la promesa bandera del candidato republicano Donald Trump.

Es el que divide la exclusiva zona de Las Casuarinas (Surco) de los pueblos jóvenes Nuevo Milenio, Trébol, Villa Hermosa y Nadine Heredia, ubicados en Pamplona (San Juan de Miraflores). Son 10 kilómetros de puro concreto y alambre de púas.

El muro de la vergüenza limeño ha sido protagonista de docenas de artículos internacionales en los que se resalta la enorme diferencia de realidades en la capital peruana. Mientras que el metro cuadrado de Las Casuarinas bordea los US$ 2,000 y casi todas las viviendas cuentan con piscinas temperadas, Pamplona Alta no cuentan con agua potable. 

 

San Juan de Miraflores y Surco divididos por un muro indignante.

  

                                           Barrios de Vista Hermosa y de San Francisco, y muro que 'protege' a Las Casuarinas.

El segundo cerco de la vergüenza fue construido por la Municipalidad de La Molina en el límite de Villa María del Triunfo. El hermanito menor del muro de Las Casuarinas tiene 4.5 km y separa el asentamiento humano La Florida de la urbanización Las Praderas. Esta vez la excusa fue: no se construyó para evitar la inseguridad sino para "delimitar un parque ecológico".

El Juzgado Penal de Turno Permanente de San Juan de Miraflores ha aceptado un hábeas corpus presentado contra del alcalde de La Molina por presunta violación del derecho al libre tránsito. Veremos qué pase al final.

 

Muro que divide SJM con La Molina.

De otro lado, en Carapongo también se encuentra un muro construido por los vecinos de San Antonio en Pachacútec, que divide los hogares de la gente del campo y de los empresarios. 

Más muros en el mundo

 Ceuta y Melilla

España construyó en los años noventa dos muros para separar sus enclaves africanos de Ceuta y Melilla del territorio de Marruecos. Son habituales los grupos de migrantes africanos que intentan traspasar esta barrera en masa para ingresar a territorio europeo.

Irak-Kuwait / Irak – Arabia Saudita

  

Después de la invasión de Saddam Hussein en 1990, Kuwait instaló una valla de unos 200 km de extensión en su frontera con Irak, compuesta por tramos de cerca electrificada, alambre de púas y muros de arena. A su vez, el rey Abdalá de Arabia Saudita ordenó una enorme valla con alambres de púas para evitar que el Estado Islámico, que opera a sus anchas en Irak, traspase su frontera. Además, Irak tiene otro muro que lo separa de Pakistán.

Sahara Occidental

El Sahara Occidental se encuentra en disputa entre los saharauis y Marruecos, que construyó un muro de cientos de kilómetros con arena, piedra, alambres de espino y minas personales para proteger lo que considera territorio propio del Frente Polisario, que busca la independencia saharaui. Está considerado el segundo más largo del mundo después de la Muralla China.

Corea del Sur – Corea del Norte

 

No es un muro en realidad, sino una zona desmilitarizada entre ambos países de 4 km de ancho por unos 250 km de largo. Fue creado en 1953 y sigue dividiendo a un país enfrentado.

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